CINE
El filme de Alison Kuhn es una de las cintas que ofrece la muestra que comienza este jueves en el porteño Cinépolis Recoleta. Toma como punto de partida los abusos sufridos por cinco actrices para el casting de una película, aunque sirve como la punta del ovillo para una práctica que es más común de lo que pareciera.

«The Case You», de Alison Kuhn, es una de las cintas que ofrece el Festival de Cine Alemán que comienza este jueves, en las salas de Cinépolis Recoleta, y toma como punto de partida los abusos sufridos por cinco actrices para el casting de una película, aunque sirve como la punta del ovillo para una práctica que es más común de lo que pareciera.
«Decidí filmarla después de que pasó la situación que narro en la película. Era mi examen de ingreso para los estudios de dirección en la Film University Babelsberg cuando otra persona que estaba ahí para tomar el examen me confrontó con esa situación. Es algo que menciono en la película», dijo Kuhn en una entrevista con Télam.
«Fue una situación muy estresante -agregó- y a la noche del primer día de la semana del examen de ingreso decidí que si me aceptaban iba a usar esa nueva posición, ese nuevo lugar obtenido, para hacer una película sobre esto. Creo que eso me dio la fuerza para superar el resto de la semana».
Kuhn reúne a otras cuatro actrices que participaron de un casting unos años antes en los que debieron presenciar y sufrir situaciones que lejos estaban de la formación de los personajes. Todas ellas quedaron marcadas por la experiencia, pero luego la desazón fue más profunda cuando se enteraron que el casting fue filmado y que iba a ser proyectado, a modo de documental experimental, en un festival de cine, sin su consentimiento.
La proyección se encuentra judicializada y por cuestiones legales Kuhn no puede dar detalles del caso ni del director ni el título del filme. «La demanda todavía sigue en pie. No puedo decir más sobre eso, solo que tardó más de lo que pensábamos cuando filmamos la película», dijo.
«Creo que Internet representa no solo un lugar importante para las actrices sino también para cualquiera que trabaje. Entiendo completamente el miedo de mi protagonista de googlearse a sí misma y conectarse con algo tan abusivo.
ALISON KUHN
«The Case You» no sólo se trata de los abusos (físicos y de confianza) durante un casting. Al menos dos actrices dijeron que esta no era la primera vez en que las manoseaban o presenciaban este tipo de atropellos a su libertad. Y, además, presenciaron esta violencia hacia menores de edad, tanto de hombres como de mujeres.
Télam: ¿Cómo fue el trabajo con tus colegas para contar sus historias?
Alison Kuhn: No tuve que convencer demasiado a nadie porque contacté a las otras cinco protagonistas y estaba claro desde el principio que las seis queríamos contar nuestras historias juntas. Fue algo mágico cuando nos juntamos por primera vez en la filmación, logramos fortalecernos mutuamente y estar siempre en contacto. Es también una historia de amistad.
T: El poder de internet y de los buscadores juegan un rol importante en esta historia. El miedo a cómo uno queda plantado hacia el futuro.
AK: Creo que Internet representa no solo un lugar importante para las actrices sino también para cualquiera que trabaje. Entiendo completamente el miedo de mi protagonista de googlearse a sí misma y conectarse con algo tan abusivo. Creo que puede ser muy dramático cuando te conectás con este abuso de Internet y que no haya nada que puedas hacer al respecto, por eso entiendo ese gran miedo que tenía a eso que te hace sentir tan débil.
T: Sobre la audición, las personas que estaban no hicieron nada para detener los abusos. En tu opinión, ¿por qué creés que pasó eso?
AK: No sé por qué nadie detuvo el abuso en la audición. Quizás fue porque no estaban seguros de estar en la posición de detener lo que el director inició, capaz ellos tenían miedo también. No sé.
T: Dos de tus compañeras sufrieron situaciones similares en otras audiciones. ¿Es habitual que pase? ¿La gente de la industria del cine naturaliza este tipo de abusos?
AK: Los dos ejemplos esos no son de la audición, son de afuera, pero creo que esto es un caso muy particular del que hablamos y no sé si es habitual en la industria. Sí creo que hay abuso de poder en general, no solo en la industria cinematográfica sino en cualquier industria. Creo que la película es un gran ejemplo de que el abuso de poder sucede, que está presente en muchas situaciones donde hay grandes diferencias de poder y que necesitamos hablar de eso, ponerlo en foco para cambiar el sistema en el futuro.
T: ¿Creés que se trata de un sistema perverso y no solo de una persona perversa?
AK: No sé si todo el sistema está pervertido, pero sí que si hay una persona que disfruta del abuso de poder y lo puede hacer es porque hay un sistema que se lo permite.
T: Para vos, ¿Cuál es el límite de las decisiones individuales, como pensar «Ok, estoy de acuerdo con esa escena», con el poder coercitivo del productor o director («Si no hago esa escena, quizás no trabajo en el futuro»)?
AK: Es una pregunta difícil. Es una pregunta que afrontamos en la película e igual no podemos dar una respuesta clara sobre eso. Creo que todos necesitan pensar por sí mismos y plantear sus límites, yo puedo decir que el límite entre el arte y el abuso tiene que ver con la comunicación y el consentimiento o la falta de comunicación y la falta de consentimiento. Creo que hay que hablar de cualquier tipo de escena difícil que tengas que filmar o actuar y que queden claras tus intenciones para que la otra persona pueda decidir si quiere o no hacerla. Especialmente si sos un director, creo que es importante que seas claro, que hables del tema y que escuches los sentimientos de los actores y actrices. Puede ser que haya gente que tenga miedo de marcar límites porque piense que no lo van a contratar más y creo que es también importante como director dar un feedback y que se fije si el actor de verdad está de acuerdo con esa escena. Es muy difícil, no puedo dar una respuesta concreta, pero sí puedo decirte que creo que todo pasa por la comunicación y el consentimiento.