La medida había sido adoptada luego de que trascendieran mensajes racistas, xenófobos y discriminatorios escritos en las redes sociales por los tres integrantes del plantel de Los Pumas hace ocho años.
«Los tres jugadores manifestaron su profundo arrepentimiento, reiteraron el pedido de disculpas, ratificaron que no es lo que piensan y que fue un acto imprudente propio de la inmadurez”, justificó la Unión Argentina de Rugby al dar cuenta de manera oficial de su decisión de dar marcha atrás con las sanciones.
Además, lindicó que los jugadores sancionados preliminarmente se hicieron «plenamente cargo y responsables, por lo que se pusieron a disposición de la Comisión para que se investiguen las circunstancias y buscar enmendar el daño causado».
«A la hora de expedirse preliminarmente, la Comisión de Disciplina ha considerado y valorado la actitud de los tres jugadores durante este proceso, y entiende que los mismos no han repetido acciones similares durante estos más de ocho años, y que han demostrado durante este tiempo ser personas de valores firmes e íntegros y dignos de integrar nuestro seleccionado”, fundamentó la UAR.
El comportamiento de los integrantes del seleccionado argentino, dirigido por Ledesma, mereció el repudio generalizado de la mayor parte del arco del deporte. Inclusive hasta figuras retiradas de la disciplina como Agustín Pichot (candidato a presidente de la World Rugby), Hugo Porta, Serafín Dengra y Eliseo Branca exigieron “fuerte autocrítica” a los componentes del plantel argentino.